¿Por qué cierran los medios que parecen innovar?
🗞️ Algunas ideas en torno al cierre de Relevo.
El ecosistema mediático en habla hispana vuelve a encogerse. El caso más reciente es el de Relevo. El diario deportivo de Vocento señalado por todos como innovador, cerrará como cabecera propia tras menos de dos años de vida.
Relevo innovó por su cobertura del deporte femenino, su trato del formato del vídeo vertical o la inclusión de este mismo método de consumo en toda su web. No ha sido suficiente: las cuentas no han salido.
Vocento lo absorberá dentro de ABC Deportes, en una decisión que implica la desaparición de un proyecto joven y la pérdida de empleo en el sector. 75 periodistas y profesionales del medio serán despedidos.
Relevo había sido lanzado como una gran apuesta para conquistar a nuevas audiencias en el entorno digital, especialmente entre los más jóvenes. Sin embargo, la falta de rentabilidad y de un modelo de ingresos claro ha llevado a su integración y desmantelamiento.
Hoy, en Reportaro nos preguntamos…
¿Por qué propuestas como las de Relevo no consiguen alcanzar la rentabilidad?
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📰 La última ronda de cierre de medios
Una mirada sobre el presente y futuro de los medios, el periodismo y la comunicación
En España se han vivido varias épocas de apertura y posterior cierre de proyectos periodísticos. La primera recorrió los años de la crisis de 2008; la segunda, tras la apertura de numerosos digitales entre 2012 y 2016; y la última ha recorrido los últimos dos años.
Porque el de Relevo no ha sido un caso aislado. En los últimos tiempos, varios medios digitales han anunciado su cierre total o una reconversión que deja fuera a sus equipos y proyectos editoriales. Algunos por decisión empresarial. Otros, por agotamiento de modelos sin sostenibilidad.
📊 Algunos de los casos recientes:
Nius, el digital de Mediaset, dijo adiós en 2023 tras 4 años de vida, dejando atrás un experimento que buscaba informar desde unos métodos distintos que los del resto del grupo.
RED/Acción, medio argentino que había logrado gran reconocimiento por su enfoque constructivo y por su comunidad de lectores, anunció su cierre tras seis años de actividad el año pasado.
República, cabecera fundado por Pablo Sebastián en abril de 2010 en el panorama digital español, cesó su actividad tras una trayectoria de más de dos décadas también hace poco. Hoy, su jugoso dominio (Republica․com) ha sido adquirido por un medio guatemalteco.
Las razones se repiten: falta de rentabilidad, pero no con los mismos modelos. Nius o Relevo apostaban por la publicidad, mientras que RED/Acción buscaba el apoyo más directo de los lectores. Una gran dificultad para dar con alternativas viables incluso cuando el producto es bueno.
Casi todo el mundo coincidía en que Relevo, por ejemplo, contaba con una redacción sólida, una identidad de marca clara y un enfoque innovador en redes sociales, pero ni siquiera eso ha sido suficiente para garantizar su viabilidad.
El caso demuestra que, hoy por hoy, no es suficiente con hacer periodismo de calidad o contar con una propuesta atractiva: sin un modelo económico sostenible y una audiencia comprometida que lo respalde, incluso los proyectos más prometedores están en riesgo.
💡 Pero no todo son malas noticias
Mientras unos proyectos caen, otros demuestran que hay otras vías posibles:
Climática, la revista sobre crisis climática impulsada por La Marea, superaba recientemente su campaña de crowdfunding para sostener su actividad. Más de 2.000 personas apoyaron el proyecto con aportaciones económicas.
También hemos visto el nacimiento de
, ejemplo en España de medios con equipos más pequeños y propuestas más minimalistas que apuestan por modelos de membresía, suscripciones o especialización temática para explorar nuevas opciones.
En pocas palabras, el cierre de medios es siempre una mala noticia, especialmente por las redacciones que desaparecen y las voces que se apagan. Pero también es una oportunidad para cuestionar qué modelos funcionan, qué quiere la audiencia y dónde está el valor diferencial del periodismo que viene.
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